martes, noviembre 28, 2006

Zero 7 - Speed Dial number 2



I don't need you anymore
I'm okay and I am sure
I don't need you anymore
Yeah I'm ok, I'm reassured

And I don't need you not today
I promise I'll call I promise I'll say
I don't need you not to stay
And if you ever need me I'll reciprocate

Your shoulders in my pocket
Speed dial No. 2
See you when I need you
See you when I do
See you when I do

Do you need me, I am here
Can you ask, can you be clear
Yes you need me, I appear
Now you are me, I am here

My shoulders in your pocket
Speed dial No. 2
Call it when you need me
See you when I do
See you when I do

Call me when you need me
Just call me when you need me

Call me when you need me
See you when I do

domingo, noviembre 26, 2006

Trotaflores

Y me han estremecido un montón de mujeres, mujeres de fuego, mujeres de nieve...
S.R.

Para cada mundo, cada prado, cada flor, cada pétalo y cada súbita danza mortuoria. Pero en especial, para ti.

He recolectado flores como he plagado de incendios las catedrales
catedrales de piernas
fuertes fortalezas las de las piernas y las del humo
y tenues
y suaves las tenazas y húmedas las causas
lo he quemado todo al tiempo que lo guardaba en el morral

para seguir trotando
y hacerme fuerte
para seguir andando
y que los vientos no me revienten

He andado creyendo en los países y en los mundos
y dado otros diez pasos seguro de las metas
y de los rumbos
he pisado a dedo limpio las guaridas de las hojas y de las cosas
y machacado a las orugas
a los grillos y a sus ingrávidas melodias
a los sueños y sus cosas

para seguir trotando
y hacerme fuerte
para seguir andando
y que ni el ruido ni la ciudad
sean aquello que me despierte

Luego me dejé de mapas
y me dejé de suertes
y me propuse llanamente croar junto a los prados
y creer sin miramientos en los campos y en las fuentes
Les canté cualquier manojo de arias y de odas
les supuse lo más grande y lo más mío y lo más siempre

para seguir trotando
y hacerme fuerte
para seguir croando
junto al frío y junto al prado
una elegía hecha de pájaros durmientes

Pero yo no era de prados
ni de mí las sinfonías
y las flores eran una por una
un sinfín de significados
y un eterno añil consciente
así que me puse a mirarlas
una a una
sin sol sobre la lupa y sin incendios saliéndome entre los dientes

para seguir trotando
y hacerme fuerte
para seguir creyendo en algo mío
y en algo digno de hincar el diente

Pero no era esa taxonomía
no
ni tampoco los nombres de las flores
las familias
la vendimia de su fruto
o su desértica unidad
tan brutal y tan silente

Eran más que las flores, los pétalos
y más que los pétalos
sus diminutas danzas
¡Cuánto tiempo perdido entre los mundos, los mapas y las estúpidas alabanzas!
Un sólo golpe de viento siempre fue capaz
de convertirme en un guerrero
y yo cazando el jugo sabio en un altar
y yo queriendo volar junto a lo grande
y junto a la muerte

para seguir trotando
y hacerme fuerte
y para no mirar lo suave y lo vano
donde se esconde la verdad
y donde se nutren los hermanos
y se hacen míticos los tridentes

Es ahora que transito sobre almohadas de helecho
terruños de paz
y gotas de sangre que se escurren entre la nieve
y sigo mirando los mundos
y los prados
y las flores y sus ecos únicos
acuñados de albores
suaves y lúbricos
y es ahora

cuando ya no me importa
y cuando pétalo tras pétalo me distingo entre las sierpes
porque a cada pétalo le canto
le doy
le vivo

porque
aunque sea sólo un segundo
uno por uno bailan para mí
y me acarician y me repudian
y luego me besan y me muerden

para seguir trotando
y para hacerme fuerte.

miércoles, noviembre 22, 2006

Versos del recuerdo

Encontré un blog fantástico aquí

Para Felipe



Alguna vez a alguien le recordé esa misma capacidad meretriz de las palabras. Y más aún, recuerdo haber no sólo identificado plenamente los días feriados y las modalidades de su putería, sino además la perversión que yacía en sus ojos, en cada una, en cada puta palabra puta.

Así, descubrí que hay palabras más putas que otras, como dije entonces. Ahora, me he olvidado de cuáles, de quiénes, qué palabras exactamente eran las más dadivosas, las más ofrecidas, las más peligrosas. Amor, historia, deseo. Recuerdo a esas tres con claridad.

Las demás me siguen tomando por sorpresa.


sábado, noviembre 18, 2006

Switch on

he aquí que me he puesto los eskís
y me he afanado a una sombrilla

y me he vestido de humo
y me comprado tres sillas


pues el paseo hoy toca
y hoy es
otra breve cabalgata

en la ciudad

de las orquídeas


Atrás los cazadores de pétalos
y en absoluto silencio
los merecedores
de etiquetas


Esta es la hora en la que danzan las flores
y en la que henchidas de sed
se marchan las rabietas:

Que no te atrapen los rumbos
valiente animal

Y que tampoco te surquen
(una vez es cruel jamás)

las metas.

viernes, noviembre 17, 2006

Desanúdense

Poesía que distancia no acerca. Pobre.

I.

I.
Érase el espejismo de una colina
fronteriza de la muerte, del miedo, y la desolación.
Érase el espejismo de un hombre habitando esa colina
y érase muy ciego y muy vasto
y muy bello
y muy parco
y érase solo, siempre solo
ya náufrago en las multitudes
o pétalo único y
cáustico
incapaz de acariciar siquiera el mosquitero
ya no digamos las alas
ni mucho menos
las manos
o las pieles
que saturan el perchero.

Érase pues, un siglo de costumbre
y un mar de ingravidez
érase una espera
érase que se era
ni güera ni tonta
ni simple
ni tromba
érase una inercia capaz de hibernación
y de fabricar olvidos cruciales
érase el espejismo
del espejismo
del espejismo
de un hombre achicharrado por su propia bruma
y acostumbrado a su hartazgo
érase mi vida cuando mi vida
era
y no permanecía siendo
era amodorrada
y siempre la trinchera en la colina
y siempre en choque de copas con la nada
érase entonces
una era hormiga ermitaña
allá
muy allá
y muy afuera

II.
Sucede la flor
como sucede el exaprubto
suceden sus horas
suceden sus piernas
Sucede la sorpresa que conmueve y que tropieza
y el desequilibrio milimétrico que me tunde
me atempera
plegaria plañidera
y que confunde rostros y fronteras
hasta caer en la orquídea
la única inefable piel tormenta
la mórbida palpable flor en fuga
la sabia y palpitante flor tortuga
memoriosa floreciente
bocadillo de locura

¡Quietos todos!
-dice el aire que la peina embobinado y maquinal-
¡Y quietos los guijarros y los tambores
y hasta las luces de palacio
y los bufones
y luego el desequilibrio y el espejismo
¡quietos todos!
el espejismo ilusión que no es uno sin el otro
y el espejismo de este hombre que
no es sino el espejismo
de su vida y de sí mismo
y quieto el hombre y su mochila de escenarios
su teatro de humo
todos quietos y callados
y a tomar el té en las horas perfectas
anestesiados por la cómplice florida
y por ella sola
quietos
la orquídea sin nombre
puede caminar
(la que durmiendo
nos despierta,
la que durmiéndonos
despierta)

III

Pero toda flor y todo fruto
toda crin más allá de su propio luto
toda magia
toda gema disimulada
y todo musgo bajo la gema
hamaca humilde de las perlas
y toda brizna
y toda algarabía
y todo eco en mutis mutando
y toda adivinanza que ocupe sólo un pestañeo
y toda magia y resonancia
y todo amor
que cuelgue en calma
y toda la infecciosa amargura
que también las flores llueven y
supuran
y aunque no quieren y aunque no matan
y aunque si flores
y todo el yo-sí-yo
y el yo en espejismo
y el no tengo mío
y todas las miradas
y todos
y aunque todo y todos
la verdad
es miniatura:

andamos
de puntitas

y estamos
de paso.


IV.

Y sabiendo mis nombres para todo
y más ahora que anudando verso y verso
de nuevo te los ofrezco
y te los tejo y te los cuento
y te los canto y te los domo

Ahora que me desanudo
y nudo a nudo me desdoblo
sembrando telarañas
y memorias del asombro

Ahora que transitas
fugaz y furibunda mientras no marchita
ni silente ni sobre mis hombros
ahora que pasas así nomás
fortuita y fuerte
te resguardo
entre mis palmas o en el celofán de algún retrato
bajo la mesa o sobre las estatuas
más arriba que los trofeos
y más abajo que la nostalgia
entre los libros
sobre las cartas

¿Comprendes que al llegar
ya te estás yendo?
¿Comprendes si me siento
a contemplarte
mientras busco la salida?

Déjale que sea
la hora del recreo:
morder sin tragar luego
masticar sin muerte
y paladear el fuego

y no olvidar
que no hay aquí
si no hay ahora
y no hay jamás
si no hay un luego.

jueves, noviembre 16, 2006

Sorpresita

Imagínate esa boca otra vez
imagínate esas ganas
imagínate ese tiempo
esas mordidas
esa paciencia
ese artilugio.

Imagínate una historia
otra
y unos labios

Imagínate esos labios, pues
imagínate si te hartas
imagina que te dueles:
frente a tu cara
y lejos de toda respuesta
acontecen ciertos labios

labios entre los labios
tiempos entre los tiempos.


Imagínate un enorme cansancio
no más:
imagínate un retorno
imagínate un hallazgo

Imagínate pues, otro eterno cansancio.
Imagínate el hambre
e imagínate el caos

contra tu boca hay sólo mi boca y
lo siento:
laméntolo todo

procuro más fiebre para mis ganas
y más ganas para mi suerte.


Hay besos que nomás ocurren

y ya luego
se agradecen.

sábado, noviembre 11, 2006

Obstrucción desazolvada-

Quisiera saber dónde está el freno de mano
o dónde está saberlo todo
Quisiera saber callarme y sonreir
y sonreir otra vez
y hacerte callar
sin morbo:

Quisiera saber transfigurarme
mientras sonríes
todo y no todo lo que puede poderse -pudiendo- pudiéndose
Quisiera saber bailar a tono:
y trazar tus modos
y no lo que se escurre
y no lo que se va
tan idiota y tan pretérito
torcerlo todo:

Quisiera soslayar
mil veces

y quisiera
tontamente o no
permanecer en el quisiera
quisiera todo este quererlo
quisiera un tren
y quisiera también cárcel y menudo ministerio

Quisiera sin marcas, y sin rumbos, y sin desventajas:
quisiera nomás decir
big bang!
y luego encallar
y ser dentroelfinal
después de todo:


Sin más: Así.
engullir ciertas ganas de sombra
y luego
nomás
devolverme quietísimo hasta el anhelo primigenio
sin pasar por el decoro

¿Se podrá? -Me digo-
¿Dolerá? -Resuelvo-

Este xoconostli son sus ganas y sus refriegos
no más:
Él es como yo
y yo siento,
Él es nomás su corazón desamparado y negro.


II.

Pero tras la luna así persisto
culebra del hartazgo y del terror
sangre de nada,
persisto siendo hoja y siendo miedo y siendo calma:

ésta -insisto-
es mi cuenta
y es afán
y es balín sin madrugada
copla cruenta y con vaivén
de lo siempre muy bien visto

¿Cómo decir?
¿Cómo un adiós sin que medie
cariño
cariño sin recúspides de nada
ni retozo de los niños?

Esta es otra cierta hora
que deviene en cien susurros
y esta es otra orquídea
que espera larga y
redoblándose en la nada
un porvenir que no es futuro


Cruel es esta puta hora de hasta-siempres
sí,
vil trapo sin tajadas
desvestido y sol saliente


Para decir que lo tengo todo
(el amor, su continuo, el maltrecho)
no hay mejor historia que una tenue y fofa canción
mal ganada
maloliente

Porque aquí es que me da todo
sin sopor
sin decoro
tras los dientes:

y sin que el fin sea más silencio
ni continuo, ni cohecho
(ni ruidito ni tesoro)
sé que este olvidar está bien hecho:
sin ser fortuito
ni ser contexto:
reposa siendo escrito
y despierta sin comienzo:

Consciente de mis ojos

y con un frío que es de trébol
y el océano en guirnaldas,
soy rastrojos
soy deseos:
y después de lo que soy
reaparezco
me sonrojo:

tras la orquídea prevalezco
y convido
y voy bebiendo.

No es que ya no quiera ser
me digo:
Yo sólo pervivo existiendo.

sábado, noviembre 04, 2006

Calaveritas pa la sapiencia.

Muerte me das miedo tengo muerte
todo porque muerte me eres muerte me tocas muerte me muerdes fuerte
muerte
Muerte hasta allá muerte de lejos mirada hasta dentro
muerte sin suerte la muerte y sus catalejos
muerte voraz
muerte sin más muerte sobre los tejos
muerte sin candela sin nombre y sin miedo
fuerte y fugaz
muerte que amaina la sombra en la alfombra de los huecos perplejos
muerte que asombras y mueres las sombras que nombras
sobre un débil prado de azulejos.

Muerte produces
muerte me hieres
muerte me fraguas me silbas me dueles cuando me quieres
Muerte abismal como
muerte sin dientes
Muerte conduces y cimbras los vientres
muerte que luego
muerte esclareces

desobedientes las trizas:
hoy el mar suda quieto y displiscente.
Muerte.


Muerte detente
resiente
cabildea esta corriente mi muerte:
Que no es mi hora ni el tintero
ni la aurora que he escogido
ni la paz la que es pudiente

No son tus tiempos ni mi gente es tu gente
Muerte
cociente gradiente envolvente:
No soy yo el que se quiere morir así de ausente
ni los lirios
ni el fuego
ni tus garras son tus dientes
Muerte
Solemnísima serpiente

No soy yo el que se va
ni soy yo el que resiente
es un par de riachuelos, quizás
o es un humo
o es otro de esos huecos que dormitan en la fuente

Y se va en agua el humo
y se olvida
y se escurre la gente
Mientras yo
mientras tú
mientras todos
terribles
se mienten.

No eres más, mi muerte
no eres nada
pues la muerte es silencio
y silencios doy siempre

No estás más
mi muerte
no eres más:
porque no eres princesa
ni al callar me haces fuerte

Perderás esta presa
te digo
temblarás muchas veces
y tus labios de higo
callarán sólo sierpes

Muerte humo
Muerte frío
Muerte vid sin amuletos:
Si morirse es ser tan quieto
mejor sólo espabila a los fuertes
y dame más, entonces
y dame fuego:

Pues es tu voz la que ruego
y tu espada es mi vientre
Ven conmigo, Muerte
sé castigo
sólo que antes sé indemne
y machuca el olvido:

Piensa atrás
te digo
piensa más
Porque es tuyo ese abrigo
del que nadie más vuelve.

Salvo tú, sobre el puente
salvo yo
el de tu ombligo

yo
el insolente
quien ahora es quien digo
y quien luego te miente.

jueves, noviembre 02, 2006

Vivencial (this can't be love)

Hay una orquídea que susurra entre trago y trago
así como hay un prado que la escucha
Hay también una enorme banda elástica
al igual que una ejecución que pretende estirarse hasta sus bordes
Habemos rutinarios
Habemos unos columpiándonos en el siempre
Habemos sin morder bocas
Habemos, aunque nos cueste.


Junto a la orquídea está el futuro
caramelo de cianuro
boquita que parece:
sol que es un severo y llano río
de niebla
entre
los
dientes
Y junto al trago están las sombras
tímidas voces entre lenguas
nos llueven
nos llueven
como pensándolo todo
como sabiéndolo en ciernes

Esta boca es un abismo largo que no mira y que no siente
Y la orquídea es una excusa
claro
y la mar es un árbol sin temor de ser durmiente.

Quiero saber cuánto es amar
cómo es amar
cómo es callarse o ensuciarse
en tiempos breves:
Saber ser una sola orquídea
sorpresa
beso sin estrofa
hueco sin salientes
Eres una tibia catarina desdoblándoseme enfrente:

Por eso quiero morderlo todo
y repasar
y conjugárteme ahí enfrente

Está todo perdido
está todo silente

No me consuela devorar
no
no es piel ni rima lo que ráudo me somete

Yo soy orquídea y soy tu voz
soy yo, soy nada
soy la levedad
soy aquello que tonto permanece

Soy los ojos del arroz
la espera
los ruegos
los pliegos
el miedo
Soy mientras tu voz arrulla al cielo a dentelladas
importuno certero
sorpresivo y sapiente:
Soy yo el arrullo que te abraza
sereno por las noches
volátil sombra siempre:
tranquilo mientras solito se traza, sí,
soy yo el segundo que se muere
soy yo lo poco
que te pasa
siendo lo mucho

que también


te siente.