Un hombre que ama golpea
la húmeda tierra con los puños
¿No tiene otra cosa que hacer a esta hora
del año, del mes de agosto?
¿Golpear la tierra solamente?
¿Amar golpeadamente
húmedamente, a puño limpio,
como a alma limpia,
a la hora de las albas
y de los precipicios?
Nada se sabe aún,
amorosamente,
acerca del amor.
El cocodrilo Huerta.
Amén.
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1 comentario:
amar llanamente
con estos y otros horarios,
me recuerda la dulzura
de mirar para ese lado,
de perderte en tierra firme,
de nadar en diez espasmos.
el amor en esta vida
tiene el nombre de tus brazos.
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