domingo, octubre 07, 2007

Mensaje para una botella.

Amor, no te conozco.
Pero sé que tu voz debe de ser dulce y feroz como una estampida de pájaros de fuego

y que nuestro mundo, que tampoco conozco
es un columpio boscoso e incansable
en el que nos meceremos bajo el albedrío del viento
y haremos de la tierra nuestra tierra.


Amor, no sé si me escuchas.
No sé si me sabes ni sé si me sientes.
No sé si soy bruma
o espuma
o fiebre estéril como ninguna
pero sé que tus piernas -las que no conozco-
son tenazas sin apellidos y muy fuertes
con las que trotaremos sobre cada piedra
y erizaremos los cabellos del mundo

Amor, mi piel china, eléctrica
mi desconocido sabor de lo eterno
mi sabiduría y mi deshauciamiento:

No te conozco. No quiero salvarte. No nos debemos nada.


Pero sé que en algún lado existes, y que para que eso pase
sólo hará falta una mirada.

1 comentario:

Lahetaira dijo...

Un amor eterno, el que nunca llega... Una botella para llenar con palabras, unos labios para besar en sueños...